Huye de todo lo negativo. De todas esas cosas que no te aportan nada, de esas actividades o hechos que son negativos por si mismos o de los que inducen negatividad en algún aspecto relevante de tu vida.
Huye especialmente de personas negativas, en ocasiones, es lo más difícil de detectar y a la par lo más fácil de hacer. Será lo que mejor resultado te dará. Son los que más te consumen.
Huye también de tu propia negatividad. Conócete, trabájate. A veces somos negativos y hay situaciones que nos hacen torcernos o pautas preestablecidas en las que somos oscuros. Tenemos que buscar siempre lo positivo. Empezando por uno mismo, con inteligencia emocional, tenemos que darnos inputs positivos, constructivos.
Respecto a fuentes externas, cuidado con las que nos sentimos forzados y pueden ser negativas, afectando a algún otro aspecto de nuestras vidas como son el familiar, laboral, los círculos de amistades y los de vida social o de ocio. En estos campos también podemos encontrar gente negativa y acciones o actos perjudiciales.
En el trabajo, asegúrate de rodeartete también de un equipo compuesto por personas positivas y constructivas.
El mayor peligro de la gente negativa es que suelen meterse en todo, contagiando oscuridad a otros aspectos diferentes al de su zona de interacción con nosotros. Así, un familiar o un amigo con el que coincidimos en una actividad deportiva, pueden generar negatividad en aspectos como el laboral, porque van a meterse en la parte oscura de nuestro trabajo, normalmente sin objetividad.
La negatividad es contagiosa y puede instaurarse en ti. Evítalo. Si frecuentas algún ambiente negativo, esta negatividad puede invadirte y reflejarse en otro de los planos de tu vida.
Pero como todo tiene remedio, la negatividad también. Busquemos lo positivo y alejemos personas y situaciones negativas en nuestro día a día. Esto, también es #ACTitud.
Y hoy, ¿con quién vas a estar? Aprovecha relacionarte con gente positiva.
Yo, ya lo he hecho, contando de nuevo con el aporte de la foto de Andrés de La Ossa.
Y, si te va gustando el contenido, te animo a suscribirte con #ACTitud y no perderte contenido.
Más razón que un santo, y además tu post me ha venido en el momento oportuno tras un día el de ayer, donde estuve rodeado de mucha negatividad. De demasiada. Un abrazo
Gracias, Miguel. Pues hoy a rodearse de todos y todo lo bueno. Tú difundes en positivo, así que lo tienes fácil. Un abrazo
EStoy con Miguel, buen timing! ojalá fuera tan fácil huir de lo(s) negativo (s) como decirlo, sin embargo es lo más saludable para la salud mental de cada cual. No hay nada peor que el drenaje de la poca felicidad que nos deja el día a día, en ese resquicio de tiempo que puedes dedicarle a ser tú mismo y perderlo por ese contacto con el lado oscuro.
Gracias, Aitor. Es más fácil de lo que parece, sólo hay que ser un pelín valiente en algunas veces. Tú sueles hacerlo y tienes un entorno constructivo-positivo, desde tu risky and funky!!! Un abrazo
Buena reflexión, Ángel. Este tema de los «influencer negativos» me parece muy importante tenerlos lo más lejos posible o al menos detectarlos bien para tomar medidas y que no nos resten energía.
Gracias, David. Siempre hay que identificarlos, los tenemos en la familia, en el trabajo, en las amistades, en nuestras aficiones, … siempre sale alguno, pero es conveniente tenerlos identificados y apartarse de ellos. Llevo años haciéndolo y vivo muy tranquilo, positivo y constructivo. Un abrazo
Gracias Angel, bonitos consejos, pero tú sabes que por mucho que te esfuerces y sin implicar a los que te rodean, si tienes un día como,, el que he tenido yo, difícilmente puedes tener tendencia a ser optimista, aunque tus palabras, me pueden ayudar a pasar circunstancias tan crueles, un abrazo.
Daniel, las cosas vienen como vienen y, cuando no están en nuestras manos las situaciones, sí que lo está el prisma con las que lo enfocamos. Ahí está la diferencia de personas, de su #ACTitud y de lo que, como es tu caso, aportáis. El día que eso deja de estar y uno se pasa al otro lado, es cuando las cosas sí que se comienzan a meter en una espiral que puede acabar en un poco. Ahí la fuerza, el tesón, el coger el toro por los cuernos, el sacar la sonrisa de donde sea y el tirar pa´lante como los de Alicante.Un abrazo y sabes que, un tío con tu tirón, a estas alturas sigue siendo capaz de lo que se proponga. Vamos a ello!!!!
Totalmente de acuerdo. Y alejarse de los » cenizos» no resulta muy difícil, yo creo, o al menos a mí no me ha resultado difícil . Lo que realmente cuesta es alejarse de la negatividad que uno mismo genera. Pero también se consigue con mucha voluntad y buena gente a tu alrededor que te ayude.
Si, Raquel. Esa es la cuestión, dar pasos, empezar por lo externo, en personas y situaciones negativas y en paralelo ir trabajándose para enfocar de un modo más positivo cómo somos. Muchas gracias.
Gracias x el post Angel. Mencionas la negatividad propia, es decir, la que nosotros mismos generamos. Esta es la q me parece mas interesante y a la q hay q prestar mas atencion. Casi siempe es fruto del cansancio y, hasta cierto punto, inevitable porque somos seres de carne y hueso. Lo importante es detectarla, autoanalizarnos y reaccionar. Si no se enquista y es acumulativa. Un abrazo
Muchas gracias por tu aporte, JMMaestre. Efectivamente, todo es más o menos controlable y podemos manejar lo que nos rodea, saliendo de entornos negativos. El problema muchas veces viene, aunque sea poco, con gestionar nuestra propia negatividad. Como en otros aspectos, es cuestión de ir atajándolo poco a poco, con pequeñas metas a superar, eliminando fuentes propias o nuestra reacción antes situaciones que nos hacen saltar el resorte interno de la negatividad. Por supuesto, debemos evitar esas acumulaciones y enquistamientos que citas. ;). Un abrazo.